INTRUSISMO EN TRANSPORTES Y ALOJAMIENTOS TURISTICOS


 



Muchos españoles residentes en zonas turísticas estamos cansados de que las autoridades locales no tomen medidas efectivas como en ibiza.


 

Lucha contra el intrusismo en transportes y alojamientos turísticos en Ibiza

Origen

El intrusismo en Ibiza afecta a transportes y alojamientos turísticos desde hace años. La demanda estacional de taxis y VTC supera la oferta legal, generando conductores ilegales en aeropuertos, puertos y zonas de ocio. Por otro lado, plataformas digitales facilitan el alquiler de pisos, habitaciones y villas sin licencia, creando competencia desleal y problemas de convivencia urbana y ambiental.


Medidas preventivas

El Consell Insular d’Eivissa ha implementado:

  • Patrullas permanentes y control tecnológico en transporte, con colaboración de Aena para limitar accesos en aeropuertos.
  • Inspecciones exhaustivas en alojamientos, usando geolocalización y análisis de anuncios digitales.
  • Obligatoriedad de incluir la licencia en plataformas y retirada inmediata de anuncios ilegales.
  • Multas significativas: entre 15.000 y 50.000 € en transporte y entre 40.000 y 500.000 € en alojamientos según gravedad.

Recursos

Se han destinado 25 inspectores y personal administrativo, además de 22 millones de euros de la ecotasa para fortalecer el control. Se emplea tecnología avanzada de mapeo y análisis de datos, y expertos con experiencia en seguridad y fraude online supervisan la planificación operativa.

Acciones implementadas

  • Controles en aeropuertos, puertos, playas y zonas de ocio.
  • Retirada de vehículos y sanciones inmediatas a conductores sin licencia.
  • Detección de anuncios ilegales y actualización diaria de mapas de alojamientos.
  • Coordinación con plataformas digitales para garantizar cumplimiento normativo.

Resultados observados

Se ha logrado reducir la presencia de taxis y VTC pirata, multando de forma inmediata. La oferta de alojamientos ilegales ha disminuido un 60% y se han recaudado 400.000 € en sanciones. La imagen de Ibiza como destino seguro ha mejorado, aunque persisten actividades informales que requieren vigilancia continua.