22 mayo 2025

VARSOVIA Y CRACOVIA

 




Lo más grande va sin reparo con lo más pequeño. Lo mediocre va solo.

Rabindranath Tagore



Cracovia y Varsovia:

 
En julio de 2017 viajamos por dos de las ciudades más representativas de Polonia: Cracovia y Varsovia. Volamos desde Alicante a Cracovia, donde pasamos los primeros tres días explorando su historia y patrimonio. Luego nos trasladamos a Varsovia para conocer la capital, antes de regresar a Cracovia para tomar el vuelo de vuelta.
 

Cracovia 


Cracovia fue nuestra primera parada. A pesar del corto tiempo, la ciudad nos sorprendió por su arquitectura medieval, su ambiente tranquilo y su centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Recorrimos la Plaza del Mercado, con la Iglesia de Santa María, el Ayuntamiento y varios carruajes turísticos (aunque los precios eran elevados).

Visitamos el barrio judío de Kazimierz, donde la historia reciente es muy visible, y la Fábrica de Schindler, un lugar clave para entender los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial en la ciudad.
 
Uno de los momentos más impactantes del viaje fue la excursión a Auschwitz-Birkenau, contratada a través de Civitatis. La visita, guiada por una persona experta, nos permitió conocer de cerca uno de los episodios más duros del siglo XX. Aunque es una experiencia difícil, consideramos que es necesaria para comprender la magnitud de lo ocurrido.

De vuelta en Cracovia, exploramos la Catedral de Wawel, el Palacio Real y el mercado local, donde descubrimos productos artesanales y platos típicos de la región.






Varsovia

 Nos trasladamos a Varsovia en un vuelo de la aerolínea LOT. Aunque es una opción de bajo coste, el trayecto fue cómodo y rápido.

Comenzamos el recorrido en el Monumento a Marie Curie, y desde allí fuimos hacia la Ciudad Vieja (Stare Miasto). Esta zona fue completamente destruida durante la Segunda Guerra Mundial y posteriormente reconstruida. La Plaza Mayor y la Barbacana son ejemplos de ese esfuerzo de restauración.

Después del almuerzo, visitamos el Palacio Real, también reconstruido tras la guerra. En su interior se pueden ver exposiciones relacionadas con la historia y el arte polaco.

 

Nos alojamos en el Novotel Warszawa Centrum, ubicado cerca del Palacio de la Cultura y la Ciencia, un edificio emblemático del periodo soviético. Aunque su estilo divide opiniones, ofrece buenas vistas desde su terraza y alberga cines, teatros y museos.

Uno de los días lo dedicamos al Parque Łazienki Królewskie, al que llegamos caminando desde el hotel. Es un lugar amplio y tranquilo, con palacios, esculturas y zonas verdes. Destaca la estatua de Chopin, muy visitada por los turistas.

También recorrimos parte de la Ruta Real (Trakt Królewski), que conecta el Castillo Real con el Palacio de Wilanów. Aunque no llegamos hasta este último, el paseo permitió ver muchos de los lugares más representativos de la ciudad.


 

Cierre del viaje


Desde Varsovia regresamos a Cracovia para tomar el vuelo de vuelta a Alicante. En pocos días conocimos dos ciudades con estilos muy distintos, pero con un fuerte vínculo con la historia de Polonia. Cracovia destaca por su conservación y su aire medieval, mientras que Varsovia muestra la capacidad de reconstrucción y modernización del país.

 






 

16 mayo 2025

ESTOCOLMO Y OSLO

 




No viajamos para escapar de la vida, viajamos para que la vida no se nos escape.




Viaje a Estocolmo y Oslo


Viajar es una forma de conocer nuevos paisajes, culturas y modos de vida. En este caso, exploramos dos capitales nórdicas que, aunque menos visitadas que otras ciudades europeas, ofrecen un equilibrio entre modernidad, tradición y entorno natural: Estocolmo y Oslo.


Estocolmo


Estocolmo, capital de Suecia, está formada por 14 islas conectadas por más de 50 puentes. Entre el mar Báltico y el lago Mälaren, su geografía le da un carácter muy especial.

Durante nuestra estancia, caminamos por Gamla Stan, el casco antiguo. Allí vimos por fuera el Palacio Real, uno de los más grandes de Europa, y la Catedral de San Nicolás, con su interior sencillo pero elegante. También pasamos junto a la Ópera Real y el Moderna Museet, dedicado al arte contemporáneo, aunque no llegamos a entrar.

Una de las cosas que más nos gustó fue caminar de una isla a otra cruzando puentes. Estocolmo es una ciudad limpia, silenciosa y muy bien planificada. El transporte público funciona bien, pero recorrerla a pie permite ver detalles que no se aprecian desde un autobús o metro.

Un detalle curioso: es muy común encontrar supermercados con sushi fresco, algo que no esperábamos.



Oslo

Oslo, capital de Noruega, también nos sorprendió por su mezcla de ciudad moderna con naturaleza por todas partes.

Visitamos la Fortaleza de Akershus, junto al puerto. Desde allí se tienen buenas vistas del fiordo de Oslo. La fortaleza conserva parte de su estructura medieval y es un lugar tranquilo para pasear.

Otro sitio que vale la pena es el Parque de Esculturas de Vigeland. Tiene más de 200 esculturas del artista noruego Gustav Vigeland, todas al aire libre. La entrada es gratuita. Las figuras representan distintas etapas y momentos de la vida, muchas de ellas muy expresivas. Es un parque diferente, que combina arte y paseo en un entorno amplio.

Tampoco faltó la visita exterior a la Ópera de Oslo, un edificio moderno y llamativo junto al agua. Se puede caminar por su tejado, algo que hicimos sin saber que era tan típico. Desde arriba se ve el puerto y parte del centro.

Nos quedó pendiente el Museo de Barcos Vikingos, cerrado por reformas en ese momento. Es uno de los lugares más conocidos de la ciudad y lo dejamos para una futura visita.


Estocolmo y Oslo son dos capitales que invitan a caminar sin prisa. Son limpias, ordenadas, bien diseñadas. No tienen monumentos espectaculares en cada esquina, pero sí ofrecen calidad de vida, respeto por lo público y un buen equilibrio entre ciudad y naturaleza. Para quienes estén pensando en un viaje diferente por Europa, valen la pena.



   

13 mayo 2025

LIMA. CIUDAD DE LOS REYES



El Perú, como el Aleph de Borges, es en pequeño formato del mundo entero.
 ¡Qué extraordinario privilegio el de un país que no tiene identidad porque las tiene todas!” 

Mario Vargas Llosa


Lima: vivir en la capital de Perú (2014–2018)

Residí en Lima desde julio de 2014 hasta junio de 2018, cuatro años en los que conocí de cerca esta ciudad compleja, extensa y llena de contrastes, capital del Perú y una de las más pobladas de Sudamérica.

Lima fue fundada el 18 de enero de 1535 por Francisco Pizarro, y hoy alberga más de 10 millones de personas si se incluye la provincia constitucional del Callao. La ciudad se extiende sobre el desierto costero del Pacífico, desde Pucusana al sur hasta Ancón al norte, cubriendo más de 130 kilómetros de litoral.

Durante mi estancia, viví en Miraflores, uno de los distritos más seguros y modernos de la capital. Estaba a solo 27 km del aeropuerto, pero en Lima, las distancias pueden engañar debido al tráfico y la falta de transporte público eficiente.

Transporte y vida diaria

Lima no cuenta con una red de metro subterráneo completa. El transporte principal lo forman los llamados “Metropolitanos”, autobuses rápidos con carriles exclusivos, y una red de “combis” y “cousters”, minibuses caóticos pero omnipresentes.

En 2016 ya se estaban construyendo nuevas líneas de metro con participación española, pero el avance era lento.

Para moverse con seguridad, especialmente desde el aeropuerto, lo recomendable era usar taxis autorizados (Taxi Green, Cabify, Uber). En la calle, hay que asegurarse de que el taxi tenga identificación y, por costumbre, regatear el precio antes de subir.

Clima y estaciones

El clima limeño es peculiar. Apenas llueve y el cielo suele estar cubierto por una neblina gris llamada “panza de burra”.

  • Invierno (junio a diciembre): temperaturas entre 12 y 19°C, humedad alta (hasta 100%), pero sin lluvias reales.

  • Verano (diciembre a mayo): cielos despejados, fuerte radiación solar, y temperaturas entre 19 y 32°C.

El Callao: puerta de entrada y contraste

El Callao es una provincia autónoma, aunque en la práctica está completamente integrada en Lima. Aquí se encuentran el Aeropuerto Jorge Chávez y el Puerto del Callao, las principales puertas de entrada al país.

En el lado turístico destaca La Punta, un barrio seguro con casonas antiguas, clubes náuticos y la Escuela Naval. También se puede visitar la Fortaleza del Real Felipe, una construcción militar del siglo XVIII.

Sin embargo, buena parte del Callao sufre altos niveles de delincuencia. En 2015 y 2016 se declaró el estado de emergencia por violencia, y aunque hay zonas seguras, en general no es un lugar recomendado para el visitante desprevenido.

Centro de Lima

El Cercado de Lima es el núcleo histórico de la ciudad. En la Plaza de Armas se encuentran:

  • Palacio de Gobierno

  • Catedral de Lima

  • Palacio Municipal

  • Palacio Episcopal

Pasear por los jirones (calles del centro) permite ver edificios de la época republicana, desde fines del siglo XIX hasta los años 30. El centro histórico es seguro durante el día, especialmente en las zonas más vigiladas cercanas a la plaza.

Barrios recomendados

Los distritos de MirafloresSan IsidroBarranco y partes de La Molina son los más seguros y modernos. Aquí vive buena parte de la clase alta y expatriados europeos o norteamericanos.

En Miraflores viví yo. Es una zona mixta: chalets antiguos conviven con edificios modernos. Pasear por los malecones junto al mar o por Av. Benavides es muy agradable. San Isidro, más corporativo, destaca por sus embajadas (incluida la española) y su desarrollo urbanístico.


 Mercados y zonas caóticas

La cara más intensa de Lima se ve en mercados como:

  • Polvos Azules

  • Gamarra

Son grandes centros comerciales informales, parecidos al Gran Bazar de Estambul, donde se venden productos de todo tipo, muchos falsificados. A pesar de operativos policiales, el comercio continúa casi sin interrupciones. Interesantes para curiosear, pero no recomendables en términos de seguridad.

 Seguridad y precauciones

Lima no es una ciudad especialmente segura. En muchos distritos, especialmente por la noche, los robos y asaltos son frecuentes. Nunca es recomendable resistirse ante un atraco.

Las zonas más recomendadas para el visitante son Miraflores, Barranco y San Isidro, aunque resultan más caras. Para trayectos urbanos, lo mejor es usar apps de transporte y evitar taxis informales.

Lima también ofrece restos arqueológicos preincaicos:

  • Huaca Pucllana, en pleno Miraflores

  • Pachacamac, más al sur

Ambos permiten conocer culturas anteriores al imperio inca. También están adaptados al turismo.

Gastronomía peruana

La cocina peruana está considerada como una de las mejores del mundo. Platos como el ceviche, el lomo saltado o la causa limeña se han ganado reconocimiento internacional.

El chef Gastón Acurio, con su restaurante Astrid & Gastón, fue pionero en internacionalizar la gastronomía peruana. Hoy en día, otros chefs peruanos han alcanzado ese nivel, consolidando a Lima como capital culinaria de Sudamérica.

Situación actual (mayo 2024)

Desde mi salida en 2018, la crisis política en Perú se ha intensificado. El intento de autogolpe de Pedro Castillo en 2022, hoy encarcelado, fue el último capítulo de una larga serie:

  • Fujimori, Toledo, Humala, Kuczynski: todos encarcelados.

  • Alan García se suicidó en 2019 al recibir una orden de detención.

La inestabilidad afecta también a la seguridad ciudadana. Para quienes viajen ahora a Perú, es fundamental estar bien informados y seguir las recomendaciones de seguridad.

Lima es una ciudad compleja, marcada por su tamaño, historia y contrastes. Vivir allí durante cuatro años me permitió conocer una capital caótica pero también rica en cultura, gastronomía y paisajes urbanos únicos. Es un destino que recompensa al viajero informado, que toma precauciones y sabe moverse con prudencia.


 
 
 

10 mayo 2025

PAISES DEL LOIRA.

 




No vivimos la vida como fue, sino como la contamos después 



En el verano de 2024, decidimos visitar Anjou, una zona del País del Loira que nos faltaba por conocer. Aunque inicialmente la confundimos con el Valle del Loira que exploramos en 2011, pronto descubrimos que son dos regiones distintas.

Anjou, antigua provincia histórica del oeste de Francia, forma hoy parte del País del Loira, y su capital, Angers, es conocida por su castillo medieval y el Tapiz del Apocalipsis. Aunque ya no tiene autonomía, su identidad sigue viva a través de su patrimonio, sus vinos y sus tradiciones.

 

Diferencias entre el Valle del Loira y el País del Loira

  • El Valle del Loira (Indre-et-Loire, Loir-et-Cher, etc.) es una región cultural y geográfica, famosa por sus castillos renacentistas como Chambord y Chenonceau.
  • El País del Loira es una región administrativa que incluye cinco departamentos, entre ellos Maine-et-Loire, donde se encuentra Anjou.
  • Ambos comparten el río Loira y una fuerte tradición vinícola, pero el Valle del Loira destaca más por su legado renacentista, mientras que el País del Loira combina costa, ciudades modernas como Nantes y una oferta cultural diversa.

 

El viaje: Alicante – Nantes – Angers

 

El 16 de agosto volamos desde Alicante a Nantes con Volotea. Al llegar, recogimos un coche de alquiler (Fiat 500 híbrido de Europcar) y tras una hora de viaje, llegamos a Angers, donde nos alojamos en el Kyriad Hotel Beauconze hasta el día 22.

Ese mismo día visitamos por primera vez el centro de Angers. Aparcamos en el Parking du Mail, bien ubicado y a buen precio. Vimos la Catedral de San Mauricio y comenzamos a recorrer la ciudad desde el Ayuntamiento, caminando por la Rue Saint-Aubin hasta la Plaza del Ralliement y el Gran Teatro.

Finalizamos la jornada en el Castillo de Angers, con sus murallas de pizarra y piedra caliza y sus 17 torreones. Regresamos al hotel y compramos cena en el cercano supermercado Intermarché.

 

17 de agosto: Brissac, Saumur y Montreuil-Bellay

  • Castillo de Brissac: el más alto de Francia, con 7 pisos y más de 200 habitaciones. Destaca por sus salones decorados y sus vistas a los viñedos.
  • Almuerzo en Saumur: restaurante Masama, cocina colombiana-francesa, ambiente agradable y sabores sorprendentes.
  • Tarde en Saumur: breve recorrido por su pintoresco centro histórico.
  • Castillo de Montreuil-Bellay: fortaleza medieval con foso, torres defensivas y jardines cuidados. Arquitectura austera y elegante.

 

18 de agosto: Angers a fondo

  • Castillo de Angers: visita interior al Tapiz del Apocalipsis, con escenas bíblicas en una galería especial.
  • Almuerzo en trattoria del centro histórico.
  • Museo de Bellas Artes de Angers: pinturas desde la Edad Media hasta la actualidad.
  • Tarde libre por el centro: Plaza del Ralliement, Galeries Lafayette, calles con arquitectura medieval y renacentista.

 

19 de agosto: Azay-le-Rideau, Chinon y Ussé

  • Castillo de Azay-le-Rideau: elegante castillo renacentista junto al río Indre. Interior decorado con tapices, biblioteca y salón de gala.
  • Chinon: almuerzo en la Plaza Mayor y paseo por el casco antiguo. Vistas de la fortaleza de Chinon desde el exterior.
  • Castillo de Ussé: inspiración para “La Bella Durmiente”. Torres puntiagudas, jardines simétricos y escenas del cuento recreadas en su interior.

 

Castillo de Montgeoffroy


20 de agosto: Montgeoffroy y barrio de La Doutre

  • Castillo de Montgeoffroy: castillo del siglo XVIII con mobiliario original. Biblioteca, comedor y jardines bien conservados.
  • Almuerzo en José Carpa (Angers): cocina moderna con ingredientes de temporada.
  • Barrio de La Doutre: paseo por un barrio con encanto local. Vistas desde el Pont de Verdun, embarcadero de la Cale de la Savatte, y las plazas Saint-Laurent y de la Paix.

 

21 de agosto: Castillos de Serrant y Plessis-Bourré

  • Castillo de Serrant: renacentista, elegante y sobrio. Biblioteca con más de 12.000 volúmenes, muebles antiguos y tapices originales.
  • Almuerzo en restaurante del centro comercial Intermarché (Angers): menú sencillo, económico y de buena calidad.
  • Castillo de Plessis-Bourré: castillo rodeado de foso, con estructura simétrica. Interior decorado con frescos, salones y torreones medievales.

 

Château du Plessis-Bourré


22 de agosto: Día en Nantes

  • Llegamos a Nantes, aparcamos en la Isla de Nantes y nos movimos en Uber.
  • Catedral de Nantes: solo vista exterior debido a los daños por incendio. Arquitectura gótica imponente.
  • Castillo de los Duques de Bretaña: recorrido por murallas, patios y salas que narran la historia de la ciudad.
  • Almuerzo en restaurante cercano.
  • Regreso caminando hasta la Isla de Nantes, paseo por calles modernas y tradicionales.
  • Compras en el centro comercial antes de llegar al hotel.

 

23 de agosto: Regreso a casa

 

Pasamos la noche en el hotel B&B del aeropuerto de Nantes. El vuelo a Alicante salía temprano, por lo que nos levantamos a las 4:30 h. El hotel estaba a pocos minutos a pie de la terminal, lo que hizo muy cómodo el final del viaje.

Este viaje al País del Loira y especialmente a Anjou fue una experiencia muy completa, con historia, arte, castillos y gastronomía. Recorriendo lugares como Angers, Saumur, Brissac, Chinon, Azay-le-Rideau, Ussé y Nantes, pudimos conocer una región rica en cultura y patrimonio, más allá de los destinos turísticos más conocidos del Valle del Loira.

 

 

06 mayo 2025

LA MANCHA. VIAJAR DESDE EL CAMPELLO

 



Cada noche morimos y cada mañana volvemos a nacer; cada día es una vida.

Edward Young




Viaje a la Mancha: Entre Historia y Paisajes


En el verano de 2022 decidimos dedicar unos días a recorrer el corazón de La Mancha, esa región extensa y serena que evoca molinos, castillos y las páginas de Cervantes. Desde El Campello partimos en nuestro coche hacia la provincia de Ciudad Real, sin prisas, con varias paradas previstas para empaparnos del paisaje y la historia. El trayecto, que superaba ligeramente las tres horas, se hizo más ameno con una pausa en La Roda, donde tomamos café y estiramos las piernas antes de continuar camino hacia San Carlos del Valle.


San Carlos del Valle


Reservamos dos noches en la Hospedería Santa Elena, un alojamiento cómodo y bien situado, con vistas directas a la impresionante Plaza Mayor del pueblo. Esta plaza, del siglo XVIII, con sus soportales de madera, simetría sobria e iglesia barroca, es uno de los rincones más fotogénicos de La Mancha. Al atardecer, el silencio se acentúa y parece que el tiempo se ralentiza. Desde la terraza de la hospedería, las luces doradas de la tarde nos ofrecieron una primera impresión serena y agradable del lugar.


Almagro


Al día siguiente nos dirigimos a Almagro, declarado conjunto histórico-artístico y conocido por su célebre Festival Internacional de Teatro Clásico. Recorrer el Corral de Comedias, el único del Siglo de Oro que se conserva intacto en Europa, fue como retroceder cuatro siglos. Aún se celebran funciones allí, y su estructura de vigas y galerías de madera sigue generando una acústica y una atmósfera únicas.

Después del almuerzo en un restaurante de la Plaza Mayor, con su característica forma rectangular y sus fachadas acristaladas de color verde, paseamos por calles tranquilas, visitamos el Teatro Municipal y entramos en la iglesia de San Agustín. También pasamos frente al Museo Nacional del Teatro, aunque esta vez no entramos. Volvimos a San Carlos del Valle con la sensación de haber conocido uno de los pueblos más ligados a la historia cultural de España.ç


Castillo de Calatrava la Nueva


La siguiente jornada la dedicamos a una de las visitas más impactantes del viaje: el Castillo de Calatrava la Nueva, situado en el término de Aldea del Rey. El acceso no es sencillo: hay que subir una carretera estrecha y luego continuar a pie por un sendero empedrado que asciende hasta la fortaleza. El esfuerzo se ve recompensado al llegar a la cima, desde donde se domina toda la llanura manchega.

El castillo, construido en el siglo XIII por la Orden de Calatrava, conserva aún su iglesia y parte de sus murallas, torres y dependencias. Lo más impresionante es su iglesia románica, vacía pero en pie, con una acústica sorprendente. Nos llamó la atención su puerta principal, de proporciones monumentales, y las vistas que se abren desde sus murallas. La visita fue tranquila, con pocos visitantes, lo que permitió disfrutar del lugar con calma.



       Villanueva de los Infantes

Villanueva de los Infantes


Después del castillo, nos dirigimos hacia el este, hasta Villanueva de los Infantes, considerado uno de los conjuntos histórico-artísticos mejor conservados de Castilla-La Mancha. La llegada a su Plaza Mayor, perfectamente simétrica y enmarcada por galerías de piedra y madera, nos dejó una excelente primera impresión. Allí se respira equilibrio arquitectónico y serenidad.

Visitamos la iglesia de San Andrés Apóstol, donde se conservan restos de Quevedo, y la Casa del Caballero del Verde Gabán, una reconstrucción de lo que pudo ser la morada de uno de los personajes del Quijote. Esta localidad, además de su importancia literaria, destaca por sus palacios y casas solariegas, muchas de ellas con escudos nobiliarios en la fachada.

Nos detuvimos a almorzar en un pequeño restaurante junto a la plaza, donde comimos platos típicos como pisto manchego y caldereta. La tarde la dedicamos a pasear sin rumbo por sus calles empedradas, disfrutando del silencio y la luz cálida que envolvía el casco histórico.


Molinos de Campo de Criptana


La última mañana la reservamos para un símbolo universal: los molinos de viento de Campo de Criptana, en el corazón del paisaje quijotesco. Subimos hasta el cerro donde se alzan, majestuosos y alineados, los gigantes que inspiraron a Cervantes. Algunos conservan su maquinaria original, y uno de ellos alberga una pequeña exposición sobre la Semana Santa criptanense, sorprendentemente detallada y bien presentada.

Desde allí, nos dirigimos al cercano El Toboso, el pueblo de Dulcinea, donde visitamos la Casa-Museo y la iglesia de San Antonio Abad. Todo el pueblo rinde homenaje a la figura de Cervantes, con estatuas, inscripciones y referencias constantes a los personajes del Quijote. Es una visita breve pero entrañable.


 Ciudad Real, punto final


Antes de emprender el regreso, hicimos una última parada en Ciudad Real, una capital discreta pero con algunos rincones de interés. Paseamos por el centro, vimos las fachadas de la catedral de Santa María del Prado, la Puerta de Toledo y algunas iglesias. No es una ciudad monumental, pero ofrece tranquilidad, calles peatonales y una gastronomía sencilla y sabrosa. Tras almorzar en una taberna del centro, pusimos rumbo de regreso a casa.






 

05 mayo 2025

PROVINCIA DE CADIZ

 



 








Es bueno coleccionar cosas; es mejor dar paseos.Anatole France 


En octubre de 2021, durante nuestro regreso a casa tras un viaje por Castilla y Leon con parada en Extremadura, decidimos pasar dos noches en la provincia de Cádiz, con base en Jerez de la Frontera. El viaje fue breve, pero suficiente para redescubrir algunos lugares históricos y disfrutar de la costa gaditana.


Catedral de Jerez de la Frontera


Jerez de la Frontera

Nos alojamos los días 18 y 19 de octubre en el Hotel Ibis de Jerez, con la intención de conocer la ciudad con calma.

  • Dejamos el coche en un aparcamiento subterráneo situado justo bajo el Alcázar, uno de los pocos monumentos históricos que aún se conservan.

  • Paseamos por la calle Larga y sus alrededores, una zona céntrica y tranquila, ideal para moverse a pie.

Durante el recorrido:

  • Vimos la catedral de Jerez desde el exterior.

  • Pasamos junto a las bodegas González Byass, aunque no llegamos a visitarlas por dentro.

  • Llegamos a la Plaza del Arenal, presidida por un monumento al General Primo de Rivera, figura histórica nacida en la ciudad.

  • También destacaron el edificio de la Alhóndiga y el Palacio de Justicia, ambos de estilo neoclásico.

Fue una jornada tranquila, con una buena primera impresión de una ciudad con historia y ritmo pausado.



 Cádiz capital


El segundo día lo dedicamos a Cádiz, una ciudad que no visitaba desde 1971. El reencuentro fue muy positivo.

  • Paseamos por el casco antiguo, con arquitectura del siglo XIX y calles animadas.

  • Visitamos la catedral, un edificio monumental que domina el perfil de la ciudad.

  • También exploramos los restos del teatro romano, situados junto a la catedral.

Después de la visita cultural, continuamos hacia la Playa de la Caleta y su malecón, con vistas amplias al océano Atlántico. El paseo fue tranquilo y agradable.

En la zona del Teatro Manuel de Falla, encontramos un parque con miradores que ofrecía buenas vistas de la bahía de Cádiz.

  • Almorzamos en el mercado central, donde, a pesar de los precios algo elevados, la calidad de los platos fue excelente. El lugar combina bien el ambiente turístico con el local.

Cádiz nos dejó una sensación muy buena: ciudad compacta, con mar, historia y buen ambiente.


Teatro romano en Baelo Claudia


Baelo Claudia (Tarifa): arqueología frente al mar


El día 20 de octubre, ya en ruta hacia Alicante, hicimos una parada en Tarifa, la ciudad más al sur de Europa.

  • Desde allí, con buen tiempo, es posible ver la costa africana con claridad.

  • Tarifa combina su papel histórico —con murallas y castillo— con el atractivo natural de sus playas de viento y arena blanca.

A pocos kilómetros al norte visitamos el yacimiento de Baelo Claudia, junto a la playa de Bolonia.

  • Esta antigua ciudad romana fue un centro comercial y de producción de salazones de pescado.

  • Se conservan restos del foro, las termas y el teatro, con el mar como telón de fondo.

Pasear por Baelo Claudia es una experiencia que mezcla paisaje y arqueología, con una gran sensación de conexión con el pasado.

Aunque fue un viaje breve, esta escapada por Jerez, Cádiz y Baelo Claudia en Tarifa nos permitió conocer nuevos lugares y redescubrir otros. Fue un recorrido por el sur que combinó historia, patrimonio y costa, dejando un recuerdo muy completo del sur de Andalucía.







 





 

 

 

VARSOVIA Y CRACOVIA